miércoles, 21 de enero de 2009

El lenguaje de los periódicos


Probablemente dentro de diez o quince años los periódicos de papel habrán dejado de existir tal y como los conocemos. La razón es evidente: cada vez se aprecia menos su función de transmisores de novedades porque la radio, la televisión e internet van muy por delante en rapidez. Cuando se publican los principales diarios, al día siguiente de los hechos, ya estamos al corriente de ellos, así que no necesitamos tanto ir al kiosco.

Sin embargo, los grandes reportajes, los análisis en profundidad, los textos de opinión y las entrevistas de prestigio seguirán teniendo a la palabra como hilo conductor. Un breve cuaderno de notas, una grabadora, un esquema de trabajo y la necesaria concentración y atención serán los elementos del Nuevo Periodismo de mañana, el mismo de ayer, el mejor de hoy.

Pero mientras todo eso llega, leamos los periódicos para saber un poco más de este mundo difícil y hermoso en que vivimos, discutamos con argumentos, opinemos sabiendo, actuemos con criterio, tras entender los hechos, no sólo a base de consignas primitivas y sentimientos burdos manipulados por los políticos. Al fondo, allá lejos, está la libertad, la sociedad democrática de hombres y mujeres que miran de frente al provenir y saben tomar decisiones por el bien de todos.

Bienvenidos al océano de las palabras, al mar agitado de las verdades y las mentiras. Coged buen esquife para navegar a salvo de tritones y fieras tormentas. En vuestra ruta os dejo los apuntes del tema. Como otras veces, podéis leerlos y descargarlos en Scribd: El lenguaje de la prensa.

miércoles, 7 de enero de 2009

Cuatro corazones con freno y marcha atrás


Enrique Jardiel Poncela (1901-1952) fue, junto a Miguel Mihura, el gran renovador contemporáneo del teatro de humor en español. Su apuesta por la ironía elegante, las situaciones absurdas, las respuestas ingeniosas y los juegos de palabras alejados del humor sainetero, le dieron bastante éxito en las décadas que antecedieron y siguieron a la Guerra Civil.

Pero Jardiel, antes que autor de teatro, fue periodista, humorista y novelista. Como humorista, colaboró en la revista Buen humor y se convirtió en uno de los más destacados miembros de esa gran generación de escritores, guionistas e ilustradores -coetáneos de los poetas del 27- que publicaron sus tiras y chistes en las mejores revistas cómicas y satíricas de la primera mitad del siglo XX: Ramón Gómez de la Serna, Edgar Neville, Tono, José López Rubio o el mismo Mihura.

Como escritor de novelas de humor, alcanzó pronto el favor del público con obras como Amor se escribe sin hache (1929), Espérame en Siberia, vida mía (1929) o Pero... ¿hubo alguna vez once mil vírgenes? (1930). Las situaciones disparatadas de estas obras, cercanas al surrealismo que empezaba a estar en boga, y el uso de un humor nuevo y original, satisficieron a un público ávido de novedades y le proporcionaron cierta fama y dinero.

La década de los años 30 supone la consagración de Jardiel en el ambiente artístico. Estrena numerosas obras de teatro, es contratado como guionista de películas en Hollywood y en París, y consigue agradar tanto a la crítica como al público. Pero su éxito fue efímero: al trauma de la Guerra Civil (1936-1939), siguen nuevos estrenos en Madrid, aún aclamados en los años 40, y una rápida decadencia que se inicia a raíz de una fallida gira por Latinoamérica en 1944. Finalmente, solo y casi arruinado, murió en 1952.

Su vida no fue especialmente feliz. A pesar del glamour de sus viajes a Hollywood, de sus aventuras periodísticas y literarias, del galanteo constante con actrices y mujeres de la alta sociedad, fue un personaje solitario y desengañado, un romántico “feo y sentimental” que no tuvo demasiada suerte en el amor. Murió solo, relativamente joven y casi sin dinero, añorando los éxitos de otro tiempo mientras vivía de anticipos a cuenta y préstamos de los amigos.

Junto a Eloísa está debajo de un almendro, quizá su obra maestra, Cuatro corazones con freno y marcha atrás queda como una de las piezas más logradas de su producción. Os recomiendo leerla sin prisas y salvando algún giro anticuado del lenguaje. Que la disfrutéis.

Aquí os dejo un enlace a la página en que hallaréis una guía de lectura de la obra:

http://www.scribd.com/doc/9930927/Cuatro-corazones-con-freno-y-marcha-atras

REFERENCIAS EN INTERNET:

De la Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Enrique_Jardiel_Poncela
Homenaje a Jardiel Poncela:
http://www.jardielponcela.com.ar/
Jardiel cumple 100 años:
http://cvc.cervantes.es/actcult/jardiel/default.htm
Página de Miguel Esquirol:
http://perso.wanadoo.es/jardielponcela/